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Como la Madre Tierra

Sangro por ti, por tus hermanos,
lloran los cielos en la vida misma.
Gimen los mares de mis entrañas
por los pequeños con que me habitas.

Hoy, cobijado en mi vientre, hijo mío,
velaré tus pasos, aliviaré tus guerras.
Curaré mis heridas, junto a las tuyas,
forjaré tu nido, como la madre tierra.

                                                       Valeria Elder